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Un virus “casi perfecto” para una burocracia que asfixia

Publicado: 11/02/2021
4 minutos

Hay 11 plantas de oxígeno donadas a hospitales por la minería aún sin instalar. En Aduanas, hace tres meses hay un equipo generador que no puede ser retirado.

El oxígeno se acaba más rápido que en la primera ola del coronavirus, pero la burocracia sigue tan lenta como siempre. En el Perú, hay un déficit de oxígeno medicinal de 110 toneladas diarias para atender a los pacientes con COVID-19, admitió la ministra de Salud, Pilar Mazzeti, al señalar que el cálculo inicial que hicieron de la demanda de este insumo para la segunda ola se triplicó.

“Hoy se requieren 510 toneladas al día en el país. El oxígeno que producen las 104 plantas del Perú llega a 400 toneladas”, dijo en la conferencia de prensa en la que el gobierno se anunció que la cuarentena se extendía hasta el 28 de febrero en Lima y una treintena de provincias del país en riesgo extremo de contagios.

“Este es un virus casi casi perfecto, que escapa al sistema de defensa, que tiene una gran habilidad para pasar de una persona a otra. El virus con el que comenzamos, no es el mismo con el que estamos ahora”, agregó la ministra Mazzetti, como para matizar ese cálculo errado de la demanda de oxígeno que hicieron.

Pero lo cierto que esta situación es muy parecida a la de la primera ola, solo que peor, porque si bien ya empezaron a llegar las vacunas, hay más camas UCI y respiradores artificiales, lo que falta es personal especializado (intensivistas) y oxígeno medicinal. Ya son 19 establecimientos médicos sin este insumo, según la Defensoría.

El gobierno ha vuelto a recurrir al sector privado, que ha apoyado al Estado desde el inicio de la pandemia, para tratar de salir de esta situación en el que está. Veamos:

  • La empresa Linde Praxair, el mayor productor criogénico del país, dedica toda su producción de oxígeno (225 toneladas por día) a 300 hospitales del país. Para ello, tuvo que dejar atender a sus clientes industriales. Otros productores privados han hecho lo mismo por la emergencia sanitaria.
  • De las 104 plantas generadoras de oxígeno que el gobierno instaló en el último año en los hospitales, 41 fueron donadas por empresas privadas, pero estas solo logran cubrir entre el 10% y 20% de la demanda, con las 67 toneladas por día que pueden producir.

¿Dónde está el cuello de botella?

En el Estado. El presidente Francisco Sagasti y la ministra Mazzetti han insistido estos días en pedir a las mineras que destinen oxígeno a los hospitales, pero estas empresas no tienen plantas generadoras; solo las empresas con fundiciones producen oxígeno industrial, que no sirve para uso humano. Y en todo el Peru solo Southern Cooper, en Moquegua, tiene una pequeña capacidad de producción de oxígeno líquido de reserva que ya destina al sistema hospitalario

Es cierto que el gobierno ha retomado el diálogo con el sector privado, pero el problema es que con esos pedidos públicos genera suspicacias, al no dar la información completa, lo que alimenta discursos radicales y antiempresa de ciertos sectores en campaña electoral.

La mayor mayor dificultad sigue siendo la excesiva burocracia. ¿No creen? Ojo a estos datos:

  • Hay 11 plantas de óxigeno donadas a hospitales de Lima, Puno y Cajamarca por la minería -de las 24 en total que entregó- que aún no pueden ser instaladas por trámites burocráticos, aunque el Minsa dice que muchas no operan porque necesitan reparación (¿no pudieron arreglarlas en 10 meses?)
  • Estas plantas inoperativas tienen una capacidad de producción conjunta de 3,2 toneladas diarias.
  •  Por ejemplo, la planta donada por Gold Fields llegó a Lima la primera semana de enero, pero aún no puede ser instalada en el hospital de Bambamarca (Cajamarca) por papelos entrampados en Diresa.
  • Otros equipos no producen porque carecen de permisos o no han sido recibidos por las autoridades sanitarias. Ese fue el caso de la empresa Macro Medicis, que ofreció en mayo del año pasado la entrega de 30 plantas de oxígeno mediana, pero nunca recibió respuesta.
  • El Minsa asegura que hace todos los esfuerzos para reparar las siete de las 10 plantas de oxígeno donadas por Chinalco a la región Junín (en riesgo extremo). Tres ya están operativas.
  • Hay otra planta generadora de las empresa oxiromero -que vende a clientes particulares que hacen colas durante días por oxígeno para sus familiares con COVID- que está hace tres meses en Aduanas a la espera de que Digimed autorice su retiro.

Como se ha visto en el caso del traslado de las vacunas, cuando el Estado y el sector privado trabajan de la mano, hay mejores resultados. Por ello, ahora que vienen las elecciones, cuidado con los discursos que buscan dividirnos.