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¿Qué cambios o reformas necesita el sistema electoral peruano?

Publicado: 23/07/2021
5 minutos

Las últimas elecciones dejaron más dudas que certezas en gran cantidad de votantes, en torno a la falta idoneidad, imparcialidad y transparencia del JNE, nuestro máximo tribunal electoral.

Si algo dejaron las últimas elecciones es que el sistema electoral peruano hace agua. El Jurado Nacional de Elecciones (JNE), como era previsible, proclamó a Pedro Castillo como presidente electo, pero lo hizo en medio de una serie de irregularidades que no quiso investigar a fondo.

Esto pone en duda no solo la legitimidad del próximo gobierno, sino también evidencia la precariedad institucional del máximo ente electoral, que provocó esta situación con sus propias decisiones, que vienen incluso desde la primera vuelta, como la de permitir la inscripción de Martin Vizcarra pese a no haber renunciado a sus acciones en una empresa dentro del plazo de ley.

El JNE incurrió además en exclusiones arbitrarias y otros excesos en la aplicación de reglas, como la de no permitir los tres días completos (72 horas) que señala la ley electoral para presentar reclamos, y en su defecto priorizar una norma de menor rango; también se negó a consultar la lista de electores del padrón para despejar las dudas respecto a las denuncias de falsificación de firmas en actas electorales.

La debilidad de los reclamos de Fuerza Popular es la falta de pruebas de cara a los estándares de la justicia electoral. Los votos se destruyen y solo quedan las actas, para cuya vigilancia efectiva es indispensable un extendido sistema de personeros. Pueden hacerte fraude donde no los tienes”, sostuvo el periodista de investigación Ricardo Uceda, quien destapó el favoritismo del JNE en el caso Vizcarra.

Todo ello hizo que se sospeche de la idoneidad, imparcialidad y transparencia de sus integrantes, y que incluso se dude de la motivación de sus decisiones, como lo señaló en su momento el defensor del Pueblo. “No estoy diciendo que se deban desconocer los resultados, lo que estoy diciendo es que todas las costuras del sistema electoral han sido puestas a prueba y tenemos que revisar nuestro sistema electoral”, dijo Walter Gutiérrez.

Este es un pequeño recuento de todas las fallas y vacíos del sistema electoral, que lo conforman la Reniec, la ONPE y el JNE, que sería saludable revisar para no repetir la misma historia de estas elecciones.

  • Desde julio de 2020 hasta la fecha, el Pleno del JNE cuenta con solo cuatro des sus cinco miembros, hecho que va contra lo que dice el artículo 179 de la Constitución: “La máxima autoridad del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) es un Pleno compuesto por cinco miembros”.
  • El quinto miembro del JNE debía ser el representante del Colegio de Abogados de Lima, pero este nombramiento nunca se llevó a cabo. Nadie se imnutó. El resultado: el titular del tribunal, Jorge Salas Arenas, tiene voto dirimente (doble voto).
  • “Antes de las elecciones, el exdecano del Colegio de Abogados Mario Amoretti sostuvo que “el voto doble del presidente del JNE no ofrece ninguna garantía”.
  • Aparecen las primeras dudas sobre la idoneidad y transparencia del proceso electoral, ya que el magistrado que actúa como presidente del JNE y con doble voto, ha defendido en el pasado a miembros de Sendero Luminoso acusados de terrorismo. Fue además militante del partido de izquierda comunista Patria Roja.
  • En este contexto, el 12 de febrero de 2021, renuncia de Oswaldo Hundskopf al Tribunal de Honor del Pacto Ético Electoral, del JNE. Meses mas tarde, el 29 de mayo, hacen lo propio Delia Revoredo (presidenta), Gastón Soto Vallenas, (vicepresidente) y Carmen McEvoy.
  •  La historiadora McEvoy lamentó dijo que se necesita un Tribunal de Honor «más proactivo y oportuno en sus pronunciamientos», y criticó la falta de apoyo del JNE para que hagan su labor.
  • El 8 de mayo, la bancada de Acción Popular presenta una moción en el Congreso Nacional de la República para exigir la renuncia del presidente JNE. Jorge Salas Arenas responde que el cargo de miembro del Pleno del JNE es irrenunciable.

Lo que vino luego es historia conocida. Una segunda vuelta polarizada y marcada por denuncias de irregularidades en varias mesas de votación, con un JNE que no daba garantía de imparcialidad y que tuvo como colofón una proclamación con gran cantidad de votantes no están convencidos de la transparencia ni legitimidad de estas elecciones.

¿Qué cambios o reformas se podrían implementar?

Algunos expertos en materia electoral han señalado la necesidad de cambios. Uno de estos, Juan Manuel Villalobos, del Instituto Peruano de Derecho Electoral y Democracia, sostuvo que se debe repensar el sistema de cómo se constituyen las mesas, por ejemplo.

  • Que los fiscalizadores de la ONPE y el JNE estén obligados a firmar las actas de votación.
  • Que los votos no se destruyan tras el cierre de las mesas, porque luego, ante las dudas, no hay forma de comprobar si lo que se consigna en las actas refleja la voluntad popular.
  • Que los miembros de mesa sean funcionarios sujetos a responsabilidades y sanciones, o que sean estudiantes de universidades que reciban a cambio incentivos (créditos, becas, cursos, etc.) por esa labor, como pasa en otros países.
  • Que el JNE no pueda funcionar si su pleno de magistrados no está completo, para evitar lo que sucedió ahora, con Jorge Salas Arenas votando doble y dirimiendo las votaciones empatadas.
  • Que la ONPE y el JNE publiquen y transparenten antes de las elecciones las listas de sus fiscalizadores durante las votaciones.