Se piensa de las empresas mineras que “nos saquean y roban, llevándose la riqueza y pagando pocos impuestos”, o también que “su impacto medio ambiental es tal que el Perú está muy contaminado”.
¿Qué hay de verdad en esto?
Ojo que es en la minería informal donde está el problema. Según Macroconsult, el 30% de la extracción de oro se hizo en minas informales. En 2019, el INEI nos dijo que la tasa de informalidad minera alcanzó el 66.4% y claro que estás minas informales no cumplen con las exigencias de salud pública ni regulaciones ambientales o seguridad laboral, no cumplen absolutamente ¡nada! Es en la informalidad donde se usan reactivos extremadamente tóxicos y contaminantes para la salud y el ambiente.
¿Qué hace el Estado frente a la minería informal?
¡Nada! ya que prefiere vendarse los ojos ante esta problemática, y ponerse a debatir de otras cuestiones que no son de vital importancia.
Lo ideal es que el Estado resuelva esta cuestión pudiendo dar facilidades de formalización a empresas que no lo están, esto proporcionaría al Estado más dinero para ser aprovechado, y la capacidad de regular a estos informales para que no tengan un impacto ambiental desastroso.
¿Es cierto que las empresas mineras nos saquean y pagan al Perú muy pocos impuestos?
¡Mentira! La minería en el Perú se enfrenta a muchos impuestos como lo el pago del impuesto a la renta, regalías mineras, impuesto especial a la minería y gravamen especial a la minería.
Según estimaciones del Instituto Peruano de Economía, las empresas mineras que operan en el Perú tienen una carga fiscal de 47,07% Es decir, el Estado peruano cobra muchos más impuestos que en Canadá, Australia, EE.UU y México.
¿A qué se debe que muchas comunidades y parte de la sociedad peruana sientan que les están robando?
¿Por qué se siente que el Perú no avanza?
La respuesta está en el canon minero, y eso que tenemos más canon de lo que se piensa. Tenemos el canon minero, el canon gasífero, el canon y sobrecanon petrolero y las regalías mineras. El problema está en los políticos y autoridades que no lo gastan y lo gastan mal. Según el MEF, entre 2009 y 2019 solo se llegó a ejecutar el 60% del presupuesto disponible. Solo en 2020, en plena crisis, el Estado recibió de canon más de $ 4.504.000.000 (cuatro mil quinientos cuatro millones de dólares), de los cuales solo gastaron el 50% en todos los niveles de gobierno del Perú. Y lo que sobró se perdió por la corrupción existente.
No es culpa de las minas, sino de los políticos y su gestión. Es importante no dejarnos florear por alguien que dice “no más pobres en un país rico” y que en su gestión ya se vienen cancelando proyectos mineros que podrían ayudar mucho a nuestro país.