Otra vez, entre gallos y medianoche, el pleno del Congreso aprobó el jueves, pasadas las 11.30 pm, el texto final del reglamento de selección de candidatos a magistrados del Tribunal Constitucional (TC), y además lo exoneró de segunda votación.
El legislador Francisco Sagasti (Partido Morado) solicitó que el documento aún no pase al pleno para que los congresistas puedan revisarlo con calma, pero su pedido fue desestimado. Así, la propuesta de la comisión especial a cargo de seleccionar a los miembros del TC se aprobó con 103 votos a favor, 0 en contra y 18 abstenciones, gracias al respaldo en bloque de las bancadas de Alianza Para el Progreso, Somos Perú, Unión Por el Perú, Podemos Perú, Frepap y Fuerza Popular.
Pero ahora no solo preocupa el apuro con que los congresistas insisten en elegir seis nuevos magistrados del TC, sino también la valla con que un candidato será considerado apto para el cargo.
Aunque el texto sustitutorio del reglamento recogió algunos cambios, como la ampliación del plazo, de 8 a 15 días, para que la Contraloría revise los documentos presentados por los postulantes al TC (declaraciones juradas de ingresos, rentas y bienes, y posibles conflictos de intereses), se mantuvieron ciertos artículos muy cuestionables.
¿Cuáles son estos? La tabla de puntajes en la entrevista personal, que señala que, en la categoría de «solvencia e idoneidad moral», por ejemplo, un candidato a magistrado del TC es «apto» al obtener solo 2 de 12 puntos. Es decir, en la práctica este requisito se elimina.

Pero lo más graves es que esto va contra lo que señala la Ley Orgánica del mismo TC, que exige que todo magistrado del tribunal debe contar con «solvencia e idoneidad moral».
«La valla que aprobó anoche el Congreso para postular al Tribunal Constitucional es tan baja, que para ser apto basta tener 2 puntos de 12 en solvencia moral o 1 punto de 5 en trayectoria profesional. Es como poder aprobar un curso con 04. Esto es abiertamente inconstitucional», explicó en su cuenta de Twitter Iván Lanegra, Secretario General de la Asociación Civil Transparencia.
Pero hay más. Otro de los artículos aprobado señala que se publicarán los resultados de la evaluación curricular de los postulantes, pero no el puntaje que le haya asignado cada congresista. ¿Por qué el secretismo? ¿Qué buscan ocultar? ¿No juraban que este proceso iba a ser transparente?