Respecto a la propuesta de Pedro Castillo de realizar una «Segunda Reforma Agraria», en la cual el candidato viene insistiendo desde sus inicios radicales, Pedro Francke, asesor económico del candidato de Perú Libre, se ha sumado en apoyarla. El economista busca, sin embargo, tranquilizar a los inversionistas y a la ciudadanía, al mencionar que esto no representaría riesgos a la propiedad privada. ¿Le creemos?
Mencionó en su twitter que no se le quitaría a nadie su vivienda o hectárea de tierra agrícola. Agregó que su propuesta de Segunda Reforma Agraria consistiría en priorizar el desarrollo de caminos, cadenas de valor, acceso al crédito y desarrollo productivo para el agricultor. Nos preguntamos sin embargo, ¿por qué llamar reforma agraria a lo más parece una política de promoción agraria? ¿Por qué traer los recuerdos de tal expropiación?
Y es que lejos de ser una gran reforma, la obra de Velasco fue nociva para el Perú. En el caso de la Reforma Agraria iniciada en 1969, su objetivo fue acabar con el régimen del latifundio, que era visto como un problema debido a que no se aprovechaba la totalidad de la tierra y se presumía que había mucho poder de negociación entre el dueño y el trabajador. Para ello se buscó cambiar la estructura de la titularidad de tierras del país.
¿Cómo se hizo? Se expropiaron los latifundios y también predios de menor tamaño, los cuales ascendieron a 10 millones de hectáreas. Estas haciendas fueron sustituidas por cooperativas agrarias, manejadas por los trabajadores organizados, que debían continuar con la producción. Sin embargo, pronto aparecieron los problemas que tuvo esta medida.

Como podemos ver, si bien se aprobó la reforma en 1968, la mayoría de fundos fueron expropiados entre 1974 y 1975, justo cuando dejan de crecer las exportaciones de alimentos. Antes de la reforma agraria, el Perú exportaba más alimentos de los que importaba. Ya para fines del gobierno de la Junta Militar, el Perú pasó a importar mucho más alimentos que los que exportaba; todo lo contrario a lo que propuso Velasco y lo que hoy propone Francke.

Fuente: Banco Central de Reserva del Perú
¿Por qué cayeron las exportaciones? Porque la producción agrícola, que venía creciendo entre 1950 y 1965, se estancó por más de 25 años por culpa de la reforma agraria. Solo a partir de 1992, con el cambio del modelo económico, es que existió nuevamente la confianza para invertir en el sector agrario y recuperarlo. Los salarios se recuperaron y miles de peruanos pudieron salir de la pobreza trabajando en este sector.

El patrón que debía dejar de «comer de la pobreza del obrero», como indicaba la propaganda de la época, terminó comiendo de su propia pobreza. Entre 1970 y 1985, la pobreza en el Perú subió 7 puntos porcentuales (de 35 a 42%). El plan que menciona Francke, que más parece una imitación del programa Sierra Exportadora (que tuvo excelentes resultados), nada tiene que ver con lo que realizó Velasco en su día, y mal hace en utilizar el mismo nombre.