Por la Unidad de Investigación
A los casos de corrupción que involucran al gobierno de Pedro Castillo se suma otra gran preocupación: la posible injerencia política de Bolivia y Cuba en asuntos internos del Perú. Una situación que ha encendido las alarmas de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) y la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso de la República.
En un informe remitido a finales de octubre a la Dirección de Seguridad y Defensa del Ministerio de Relaciones Exteriores, la DINI advierte el ingreso irregular a territorio peruano de al menos una decena de operadores políticos del exmandatario boliviano Evo Morales y del Movimiento al Socialismo (MAS). La presencia de estos personajes está relacionada a las actividades proselitistas de Perú Libre en los últimos meses.
La alerta de la DINI se debe principalmente al temor del incremento de la acción de grupos radicales en el país. “La cada vez mayor presencia e influencia de [Evo] Morales en el Perú abrirá espacios hacia una mayor politización de sectores extremistas sobre temas sensibles como el cambio de Constitución y la despenalización de la hoja de coca”, indica el documento suscrito por el jefe de la DINI, José Luis Fernández Latorre.
El exdirector general de Inteligencia del Ministerio del Interior José Luis Gil considera que el desplazamiento de estos agentes políticos busca la implementación y la consolidación del poder “social-comunista” en el Perú.
“Para que un país llegue a ser comunista tiene que pasar por etapas. La primera fue la de las guerras, guerrillas y conflictos sociales que son parte de la etapa violenta para acceder al poder; la segunda parte es el problema —acceso, implementación y consolidación— del poder, donde nos encontramos en la actualidad; y la tercera parte es la revolución socialista propiamente dicha”, explica el experto a Piensa.pe.
¿Quiénes son estos agentes bolivianos?
Según la DINI, “el 10 de agosto ingresó al país por Desaguadero una delegación del partido político boliviano MAS para participar en el Foro Sindical de la Federación Nacional de Trabajadores de Educación del Perú”. Entre ellos figuran César Dockweiler Suárez, Óscar Barriga Arteaga, Ibeth Parra Villa Conde, Fernando Huanacuni Mamani, Félix Cárdenas Aguilar y Cesia Vargas Águila.
César Dockweiler fue gerente de la empresa estatal Mi Teleférico y actualmente es el coordinador departamental del MAS en La Paz, en Bolivia. Es investigado por la fiscalía de su país por presuntos cobros irregulares de aportes, uso indebido de bienes del Estado y tráfico de influencias por el uso de un laboratorio audiovisual estatal donde posiblemente trabajaron trolls, elaborando publicidad para favorecer al MAS.
Otro hombre cercano a Evo Morales es Óscar Barriga, el expresidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos. En agosto del año pasado, Barriga Arteaga y otros exfuncionarios fueron denunciados ante la fiscalía anticorrupción boliviana por la suscripción de contratos por casi un millón de dólares sin licitación pública entre los años 2018 y 2019.
En la lista de visitantes también resalta el nombre del exviceministro boliviano de Descolonización, Félix Cárdenas. Un investigador de pueblos indígenas, licenciado en Ciencias Jurídicas y padrastro de la hija de Evo Morales. De acuerdo al diario “Página Siete”, Cárdenas duró nueve años en el cargo, pero en mayo de 2019 tuvo que renunciar al hacerse público los negocios irregulares de su esposa Francisca Alvarado, dueña de una emisora radial en el departamento de Oruro, con el Estado boliviano.
Asimismo, la DINI alertó a la Cancillería sobre la presencia de otros agentes bolivianos que no registraron su ingreso ni su salida del país. Es decir, no pasaron por los controles migratorios regulares. Se trata del dirigente socialista Cecilio Máximo Ilasaca Quispe; el exviceministro de Coca y Desarrollo Integral boliviano, Dionisio Núñez Tangara; la exintegrante de la Federación Sindical de Campesinos del Norte de Potosi, Delina Chile Mamani; y el ciudadano boliviano y simpatizante del MAS, Sebastián Felipe Gabriel.
Un reportaje de Panorama reveló que Cecilio Ilasaca registra oficialmente su última fecha de ingreso y salida del Perú en enero de 2019. No obstante, durante los últimos meses participó en diversos eventos, foros y encuentros políticos realizados en Cusco, Puno, Arequipa y Lima. Además, ha tenido apariciones en canales de televisión local. Según la DINI, Ilasaca Quispe sería un agente de inteligencia encubierto del Ministerio de Gobierno de Bolivia.
Otros casos similares son los de Sebastián Felipe, Dionisio Núñez y Delina Chile. El primero no registra movimiento migratorio en territorio nacional, sin embargo, participó en un encuentro internacional en julio del presente año en Lima. Los dos últimos estuvieron el 2 de octubre en Pichari, Cusco, el mismo día en que el presidente Pedro Castillo junto al congresista Guillermo Bermejo visitaron las comunidades cocaleras.
Para el exmiembro del GEIN José Luis Gil, el gobierno de Pedro Castillo está teniendo éxito para sus planes políticos, pese a la crisis. “Si bien es cierto este avance es por la estrategia que están aplicando, también lo es por el hecho de que la oposición no está haciendo un trabajo organizado. La derecha o la ultra derecha o como quieran llamarlos han demostrado una inhabilidad para crear un solo frente. El problema de fondo es la ignorancia sobre el fenómeno, si no lo conoces, entonces no tienes certeza, por lo tanto, no tienes convicción y puedes caer en el juego de la gobernabilidad”, dice.

Cabe mencionar que la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso, presidida por el fujimorista Ernesto Bustamante, declaró persona no grata al expresidente de Bolivia Evo Morales por “su negativo activismo político en el Perú y su evidente injerencia e intromisión en la agenda política, social y económica del gobierno del Perú”.
De acuerdo al pronunciamiento, Evo Morales realiza eventos proselitistas en el Perú desde julio pasado y “brinda declaraciones ingratas que advierten de una agenda política de acuerdo a los intereses extranjeros”.
Un “espía cubano” como embajador
Hace una semana el Ministerio de Relaciones Exteriores recibió las credenciales de Carlos Zamora Rodríguez como Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la República de Cuba en el Perú. Un diplomático acusado de ser un agente encubierto del servicio de inteligencia cubano y afín a los intereses del régimen comunista de La Habana.
“Es un espía con vasta experiencia, acumulada en sus más de 50 años de actividades de espionaje en beneficio de los intereses de la dictadura cubana. Si el gobierno de Perú decide destruir la democracia desde adentro, tendrá en Zamora al mejor asesor del mundo. Evo Morales y su relación con Zamora son un buen ejemplo de eso”, aseguró Enrique García, exoficial de Inteligencia de Cuba, a Perú21.
Carlos Zamora, conocido como ‘El gallo’, también fue embajador cubano en Bolivia y estuvo vinculado a operaciones para desestabilizar el país altiplánico en noviembre de 2019. Según medios bolivianos, el “espía cubano” buscó crear enfrentamientos y desarticular las protestas pacíficas que exigían la salida de Evo Morales.
Antes de ello, fue embajador en Ecuador (1984), Panamá (1998-2004), Brasil (2009-2013), y El Salvador (2017-2018), a donde llegó acompañado de su esposa, Maura Juanpere Pérez, otra oficial de la Inteligencia cubana.
Sobre la designación de Zamora, el vicealmirante en retiro de la Marina de Guerra del Perú y exvicepresidente de la República, Luis Giampietri, alertó que se trata de una estrategia del gobierno cubano, no sólo para continuar con su programa político en nuestro país, iniciado en los años de Juan Velasco Alvarado, sino para controlar los movimientos de Pedro Castillo y Vladimir Cerrón.
“Durante el gobierno de Velasco, Cuba envió una serie de operadores políticos para infiltrarse entre nosotros. Por ejemplo, llegaron como cien médicos, de los que hoy no se sabe nada y ni siquiera si eran médicos de verdad. Lo mismo está pasando ahora con el nuevo embajador, quien está retomando el trabajo de los cubanos enviados en esa época”, refiere Giampietri.
Con la agudeza que le dan sus años como experto en inteligencia naval, Giampietri explica que el papel del conocido como ‘Gallo’ Zamora, será el de monitorear e informar sobre la situación del gobierno de Castillo al Partido Comunista Cubano, pero además influir en sus acciones, teniendo como nexo a Vladimir Cerrón.
“No debemos olvidar que Cerrón es el principal agente cubano en nuestro país. Él fue formado allá, estudió medicina allá y le debe mucho al gobierno cubano. La presencia del ‘Gallo’ Zamora en nuestro país obedece al control que quieren ejercer sobre el Lápiz, eso es evidente. Este es un programa que lleva décadas, que se truncó por un tiempo, pero que hoy quieren retomar”, explica.
Finalmente, José Luis Gil también opinó sobre la designación del embajador Carlos Zamora. “Tener un embajador con su esposa que son exoficiales u oficial del área de inteligencia de Cuba y que han tenido acciones en otros países, realizando actividades de espionaje, manipulación de fuentes y de utilización de acciones de inteligencia, es un peligro inminente para el Perú. Con esto se verifica que el gobierno de Pedro Castillo es parte de esa conspiración internacional social-comunista que viene de Cuba y Venezuela”, expresó.