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Fray Vásquez Castillo y la ‘Gran Familia’ presidencial

Publicado: 21/02/2022
7 minutos

Sindicado como uno de los operadores más importantes dentro del entorno presidencial y coordinador de las reuniones clandestinas de su tío, el sobrino de Pedro Castillo es investigado por la fiscalía y hasta por dos comisiones del Congreso. Dueño de un restaurante con peculiar nombre, frecuentado con cuestionados y siniestros personajes, sería también la cabeza de otro negocio familiar: el cobro de cupos y tráfico de influencias, en el que participarían algunos de sus hermanos y trabajadores de confianza.

Desde escandalosas recomendaciones laborales en el sector público, pasando por un inesperado cargo en la comisión de transferencia del Ministerio de Defensa, y hasta anfitrión de las hoy conocidas reuniones en la casa del pasaje Sarratea, Fray Vásquez Castillo, el sobrino predilecto del presidente de la República, Pedro Castillo, es un personaje clave en la historia de movidas, malas designaciones y presuntos actos de corrupción dentro del círculo íntimo del profesor chotano.

Aunque su brevísima y célebre trayectoria política ya es conocida gracias a los diversos informes y reportajes que se han revelado en los últimos meses, no está de más recordar su inusual ascensión en el poder: de joven emprendedor, dueño de un chifa/pollería en un populoso barrio del Callao, a hombre de confianza del presidente más cuestionado e ineficiente de los últimos tiempos. 

Precisamente, su historia podría comenzar en el concurrido local de la avenida California (Mz. C, lote 11), en el ex Fundo Oquendo, donde Fray Vásquez Castillo abrió en octubre del 2016 el conocido restaurante Kayako, especializado en pollos a la brasa y comida oriental, pero también el lugar de reunión de pintorescos personajes, varios de ellos cuestionados en el mundo artístico y vinculados a diversos escándalos.

No del todo famosos, pero con algunos minutos de fama, sujetos como los raperos Andy V y Luisito Caycho, el cómico Cachay, el payaso César ‘Chacalón’ Mendoza (padre del actor Johan Mendoza, quien se hiciera conocido por interpretar, de niño, al desaparecido cantante Chacalón en su serie biográfica), orquestas menores de salsa y de cumbia, conjuntos folclóricos, chamanes, exvedettes y variados individuos en busca de notoriedad desfilaron por este predio.

Basta con revisar las redes sociales para encontrar diversos flyers e invitaciones a eventos en el supuesto chifa, que cada fin de semana entre los años 2017 y 2020 se convirtió en una suerte de centro de convenciones para los “marginados” de la farándula local, quienes encontraron en sus instalaciones un espacio para alargar su vigencia.

Las malas juntas

Y es en ese momento que la historia de Fray Vásquez se torna, por decirlo de algún modo, tenebrosa. Según fuentes cercanas al sobrino del presidente, más o menos entre el 2018 y 2019, el joven emprendedor empezó a ser frecuentado ya no sólo por ex figuras caídas en desgracia, sino también por prontuariados personajes que veían con buenos ojos el crecimiento de su negocio.

“Kayako tenía buena fama por sus pollos y la comida en general que vendía. Se hizo un lugar muy frecuentado, emblemático en el barrio de Oquendo, que como bien sabes, es una zona donde imperan las mafias de extorsionadores y tráfico de terrenos. Es la herencia del desaparecido Cholo Jacinto, quien batuteaba (dirigía) toda esta zona”, comenta un experimentado policía del Callao.

Es en ese contexto que algunos sujetos vinculados a las mafias de la construcción civil y otros delitos como tráfico de drogas y de terrenos habrían estrechado vínculos con Fray Vásquez. Es más, según la fuente, el sobrino del presidente les habría facilitado su local para celebrar toda clase de reuniones, no sólo familiares, sino también de negocios, obviamente turbios.

Samir Villaverde, empresario vinculado a Fray Vásquez Castillo.

“Uno de esos sujetos fue el ahora empresario Samir Villaverde, quien como todos saben, estuvo preso por robo agravado y fue expulsado de las fuerzas armadas por una serie de indisciplinas y delitos. Su amistad con Fray Vásquez comenzó en su restaurante y terminó en Palacio de Gobierno”, declara el agente policial.

Samir Villaverde, como es conocido, es el dueño de la empresa de seguridad Vigarza, en la que laboró el exsecretario del despacho presidencial, Bruno Pacheco, y ha sido incluido en la investigación que el Ministerio Público abrió (y suspendió inmediatamente) contra Pedro Castillo. Según la fuente consultada por Piensa.pe, Villaverde apoyó económicamente a la campaña de Perú Libre en las últimas elecciones, gracias a su cercanía con Fray Vásquez.

Otra visita al restaurante de Vásquez, que hoy resulta irónica, fue la del excongresista Kenji Fujimori, quien el 4 de enero del 2020 se reunió con un grupo de colaboradores en el local del barrio de Oquendo y fue grabado por el propio Fray Vásquez, quien, en un video subido a las redes sociales de su negocio, le pide saludos para sus seguidores.

Kenji Fujimori, en visita al restaurante de Fray Vásquez, enviando saludos antes del que el sobrino se declare duro opositor del fujimorismo

La gran familia chotana

Dejando un poco de lado la historia del restaurante Kayako —que curiosamente cambió de nombre hace unos meses por el de ‘La Familia 365’— es necesario mirar un poco más allá de Fray Vásquez, específicamente a algunos de sus hermanos y hombres de confianza, que vienen haciendo de las suyas desde que su tío asumió el cargo más importante del país.

Como mencionamos al inicio de este reportaje, ya es conocida la influencia de Fray Vásquez, por ejemplo, en la irregular contratación de las hermanas Katicza Blanco Jiménez y Nathaly Blanco Jiménez, ambas vecinas del barrio de Oquendo, en Essalud; también su papel de anfitrión en las reuniones en la casa del pasaje Sarratea, en Breña; y su designación en la comisión de transferencia en el Ministerio de Defensa.

Por todo eso, Fray Vásquez es hoy investigado no sólo en el Ministerio Público, sino también por las comisiones de Fiscalización e Investigación del Congreso de la República, que ya han sufrido algunas de sus malas mañas, como la entrega de información falsa o de documentos fraudulentos, entre ellos una prueba de Covid-19 para justificar su ausencia por motivos de salud.

De lo que poco o nada se ha hablado hasta ahora es de su papel como cabeza de una red de tráfico de influencias vinculada al círculo íntimo del presidente. Un círculo en el que también participarían sus hermanos Jaime y Cledin Vásquez Castillo, su primo Gian Marco Castillo Gómez, y otros parientes y allegados a la familia presidencial.

Aunque no existe, de momento, una denuncia formal, Piensa.pe tuvo conocimiento de varios casos de cobro de dinero para reuniones clandestinas con Pedro Castillo, reuniones coordinadas por sus sobrinos que no se llegaron a concretar, pero por las que sí recibieron jugosas sumas de dinero.

Jaime Vásquez Castillo, sobrino sindicado de haber cobrado 5 mil soles a dirigente por reunión con su tío. (FacebooK)

“Antes de la toma de mando de Castillo, me cobraron 5 mil soles para reunirme con él, sin celulares, ni micrófonos, ni cámaras, para poder hablar sobre proyectos y posibles trabajos. Yo le pagué a un intermediario, a la mano derecha de Jaime Vásquez Castillo, quien es su chofer y hombre de confianza. Pero nunca se realizó la reunión, y tampoco me devolvieron el dinero. Tengo pruebas, audios, mensajes”, señala un dirigente huancavelicano.

Según esta persona, que por temor a represalias prefiere mantenerse en el anonimato, su caso no sería el único y viene organizándose con otros agraviados para hacer la denuncia formal en los próximos días. También asegura que otros sí lograron concretar sus reuniones, previo pago, ya sea en Palacio de Gobierno o en la casa del pasaje Sarratea.

“Mira, somos un montón las personas que hemos pagado por reunirnos con (Pedro) Castillo, entre 3 mil y 5 mil soles, por estar con él unos minutos. Somos gente de distintas zonas, muchos apoyamos su campaña. No sé si él está al tanto de eso, pero sus sobrinos y su gente de confianza viene sacando provecho de todo esto. Ahora que Fray está investigado y en la mira de la justicia, esto tiene que salir a la luz”, señala otro dirigente, ex miembro de Perú Libre en Ayacucho.

No sólo es el llamado ‘gabinete en las sombras’, o las reuniones clandestinas en el despacho de Breña, también estaría esta red de cobro de cupos y tráfico de influencias dirigida por el sobrinísimo del presidente. Casos graves de corrupción, que esta vez sí podrían desencadenar en la esperada vacancia.