Tomemos conciencia. El nuevo coronavirus no se ha ido. Sigue ahí, por ello es importante que no bajemos la guardia y mantengamos las medidas de autocuidado. Por ahora, mientras llega la vacuna (que llegará con retrasos al Perú por cierto), es la única manera que tenemos para evitar que las autoridades vuelvan a imponer restricciones a la movilidad para este fin de año.
Pero lo que se ha visto en estos últimos días preocupa: aglomeraciones de gente en zonas comerciales de Lima a pocos días de la Navidad y el Año Nuevo y el relajamiento de los protocolos de bioseguridad han convertido a estos lugares en potenciales focos de contagio de COVID-19.
La Unidad de Inteligencia y Análisis de Datos de Essalud ha identificado algunas zonas de la capital donde hay mayor riesgo de contagio por estas fechas. El Mercado Central, Mesa Redonda y La Parada son los puntos en los que se han registrado 300 casos en un kilómetro a la redonda de sus establecimientos.
El terminal de buses Yerbateros es otra zona de riesgo, con más de 260 contagios. Algunas zonas y centros comerciales de distritos con una alta densidad poblacional como Santa Anita también figuran en la lista, al igual que centros de abastos como Gran Mercado Mayorista de Lima y el Mercado de Productores, que suman 230 infectados, según los datos de Essalud.
Además están zonas comerciales de San Juan de Lurigancho, con 210 casos por kilómetro a la redonda; en las de Los Olivos, los casos llegan a 140.
En la mayoría de estas zonas comerciales no se ha respetado los aforos ni los protocolos de bioseguridad. «Nos hemos olvidado de que estamos en pandemia», dijo la jefa de Essalud, Fiorella Molinelli en Canal N, al señalar que no solo el sector Salud es responsable de vigilar que se cumplan las medidas, sino también lo son alcaldes y los dueños de establecimientos.
“Hemos estado en el Mercado Central, Gamarra y hemos visto que las personas no respetan el distanciamiento; estas épocas han demostrado que la euforia nos gana y cambiamos el comportamiento de autoprotección”.
Fiorella Molinelli, jefa de Essalud.
Ante el incremento de casos que se han dado en las últimas semanas, sobre todo en la costa norte del país, el Colegio Médico del Perú (CMP) evalúa recomendar al Ministerio de Salud (Minsa) una cuarentena focalizada por Navidad y Año Nuevo.
Lo que puede ser determinante para un nuevo brote de la infección es la movilización de personas por estas fechas, explicó el decano del CMP, Miguel Palacios. Agrego que los comités del gremio que encabeza planteado tres acciones:
- Que el horario de toque de queda, que ahora es entre la medianoche y 4:00 a.m., se inicie más temprano.
- Que se disponga la restricción de vehículos
- Que se ordene una cuarentena focalizada del 22 de diciembre al 6 de enero.
Para el decano del CMP, de darse, tiene que ser una cuarentena focalizada, porque el comportamiento ciudadano no es igual en todos los lugares. «No (se debe) cometer el error de la vez pasada de una cuarentena estricta», apuntó. Y es verdad, las medidas restrictivas de los últimos meses han tenido un impacto económico muy fuerte en la mayoría de sectores productivos del país.