No me florees, Principal

Salaverry no va más en Perúpetro, pero ¿cómo queda el ministro González?

Publicado: 26/01/2022
4 minutos

El excongresista renuncia tras informe de la Contraloría, pero el titular de Energía y Minas igual debe responder ante el Congreso este 31 de enero, cuando sea interpelado, por la irregular designación del aliado político de Pedro Castillo.

Daniel Salaverry, excongresista y aliado del gobierno, presentó su “renuncia irrevocable” al cargo de presidente de directorio de Perúpetro, en medio de las críticas y cuestionamientos a su designación que han puesto en la mira de la oposición en el Congreso al ministro de Energía y Minas, el no menos cuestionado Eduardo González Toro.

En su carta de renuncia, Salaverry no menciona el informe de Contraloría que confirma que su nombramiento fue irregular, porque no cumplía el perfil para el cargo. Al contrario, el también excandidato presidencial de Somos Perú señala que su designación se hizo “de acuerdo a ley” y luego politiza su salida de Perúpetro para intentar justificarla.

“A fin de evitar que esta situación siga siendo utilizada como herramienta de desestabilización política para atacar a su Gobierno (…) es que presento mi renuncia irrevocable al cargo”, se lee en la misiva que Salaverry le remite al presidente Pedro Castillo.

¿Cómo queda el ministro González Toro?

Antes de la renuncia de Salaverry, el silencio del ministro González sobre este tema fue elocuente. Pero quiera o no, tendrá que explicar ante el Congreso, este 31 de enero cuando sea interpelado, sobre porqué dijo que Salaverry no iba a asumir funciones en Perúpetro hasta que la Contraloría se pronuncie sobre su designación.

Ahora se sabe que eso fue mentira, porque documentos difundidos por Panorama de la misma empresa estatal revelan que Salaverry acudió a la sede institucional en cuatro ocasiones:  el lunes 10, jueves 13, viernes 14 y lunes 17 de enero, participó en reuniones con otros miembros del directorio, y hasta se le asignaron bienes para ejercer su labor: una oficina, una laptop, un teléfono celular y un vehículo con chofer.

El propio ministro González Toro había asegurado el viernes 14 ante la Comisión de Energía y Minas del Congreso que Daniel Salaverry aún no podía “ejercer sus funciones mientras no resuelva lo de Contraloría”. Y como se sabe, la Contraloría ya resolvió el último viernes 21 de enero y concluyó que si designación fue irregular, porque no acredita la experiencia profesional en el rubro  ni el perfil técnico que el cargo exige.

Contraloría confirma irregular designación de Salaverry by Alejandro Castro Backus on Scribd

Renuncia o censura

Han pasado cuatro días desde ese pronunciamiento, y el titular de Energía y Minas no dice si el nombramiento seguía firme o iban a rectificar la decisión, pero la oposición en el Congreso lo considera responsable político de la irregular designación de Salaverry en Perúpetro.

González Toro suma un cuestionamiento más a su ya resistida designación como ministro. (El Comercio)

El ministro, o es incompetente para no saber lo que pasaba o nos mintió adrede en el Congreso. Con la información presentada, al ministro no le quedará otra que renunciar. Además, el 31 de enero irá a ser interpelado y no me queda duda de que podría ser censurado. No veo otra vía”, dijo el congresista Jorge Morante (Fuerza Popular).

“Debe tener un poco de dignidad y dar un paso al costado. Hay situaciones en las que el ministro no ha actuado como corresponde y a ello se suma el motivo por el que será interpelado. Él ya debió dar un paso al costado. Es probable que (la bancada) apunte a una censura, pero vamos a esperar al 31 de enero”, sostuvo por su lado el legislador José Cueto (Renovación Popular).

“Quien responde ante esta situación es el ministro de Estado y ahora tendrá que hacerlo ante el Congreso. Todo está claro, la censura es una posibilidad, pero lo que sí existe es una responsabilidad política del ministro”, comentó el vocero de Alianza para el Progreso, Eduardo Salhuana.

“Queda claro que, desafortunadamente, se ha instaurado en la gestión del Estado la mediocridad y la falta de transparencia e idoneidad”, apuntó en tanto el congresista Carlos Anderson (Podemos Perú), mientras que su colega Carlos Alva (Acción Popular), concluyó: “Con todas las pruebas, ahora la decisión radica en el presidente Pedro Castillo, quien debe retirar inmediatamente a Salaverry y apostar por funcionarios capacitados”.

Así, a estas alturas, queda claro que el problema del presidente Pedro Castillo no es de “aprendizaje”; es de malas decisiones. Y si fuera cierto que quiere convocar a “los mejores” para su gobierno, como ha dicho en sus primeras entrevistas, no tendríamos de ministros a Eduardo González (Minem), Juan Silva (MTC) o Rubén Ramírez (Minam), por citar a algunos; tampoco a funcionarios como Daniel Salaverry (Perúpetro); Hugo Chávez (Petroperú) o Julián Palacín (Indecopi), por mencionar solo algunos.