Para aliviar el impacto de una de las cuarentenas mas estrictas del mundo, la nuestra, el gobierno peruano aún sigue repartiendo un conjunto de subsidios (bonos) destinados a las personas mas vulnerables. Decenas de miles de personas siguen esperándolos.
La Asociación de Contribuyentes estimó que al 1 de julio, casi 100 días después de iniciada la cuarentena, la entrega de los bonos Yo me Quedo en Casa, Bono Rural, Bono Independiente y Bono Universal registra un avance promedio de 80%.
El objetivo del Gobierno peruano, vía estos subsidios, fue llegar a 6,8 millones de hogares peruanos (el 75% del total de hogares) y reducir el impacto económico generado por las medidas decretadas en el marco de la emergencia nacional, que incluyeron toques de queda y aislamiento social obligatorio por más de 100 días.

Sin embargo, el equipo de Contribuyentes explicó que hay un problema muy serio en la focalización (ubicación y determinación) de los hogares y en la efectividad en la entrega de bonos, especialmente de los bonos Rural y Universal, que mostraban porcentajes de avance de 50% y 70%, respectivamente.
Sumado a ello, un informe de la Contraloría General de la República, publicado en junio, detectó que 214 758 hogares que cumplían con los requisitos no fueron incorporados al padrón de beneficiarios.
De acuerdo con Marcel Ramírez la Torre, director de la Asociación de Contribuyentes, el Padrón General de Hogares (PGH), presenta inconsistencias técnicas. “El segmento no pobre vulnerable nunca ha estado bien reflejado en el PGH, pues este fue creado para identificar a los hogares pobres exclusivamente, dejándose sin protección social al conjunto de hogares de clase media, independientes y muchos vinculados al empleo informal”, dijo.
En esa línea, desde el mes de abril muchos expertos alentaron al Gobierno a generar un verdadero bono universal que alcance a toda la población y cuya entrega sea canalizada a través de números celulares, billeteras electrónicas y otros medios alternativos. El gobierno nunca hizo caso.
De hecho, era mejor que el bono llegue rápido a quienes más lo necesitaban aunque en el camino se vean beneficiados otros peruanos que no lo necesitaban mucho, a ver como miles de peruanos nunca los recibieron o para hacerlo tuvieron que ser parta de ese penoso espectáculo de largas colas, aglomeraciones que trajeron –como supimos luego– muchísimos contagios.
Seguramente la razón por la cual los técnicos del gobierno no quisieron crear un bono universal, fue para no “desperdiciar” el dinero del estado, o no dárselo a quienes no les correspondía, pero adivinen qué: el estado no tiene dinero, administra el tuyo y siempre es mejor que el dinero que tiene el estado regrese a los ciudadanos. Ellos lo sabrán usar mejor en una situación como esta.